Fabricación de Instalaciones de Tratamiento de Superficies

El horno estático permite finalizar el proceso de tratamiento y de recubrimiento de manera óptima, según el requerimiento de cada pieza.

Admite  poder trabajar con una gran versatilidad de piezas y fabricados, adaptándose a las necesidades particulares que cada elemento precise y ofrecer la calidad que el cliente busca.

Son muchas las veces que un industrial precisa una instalación que permita cambios fáciles y rápidos, adaptable a distintas piezas, que le permita cubrir a una gran tipología de clientes y una gran variedad de opciones en sus fabricaciones. Para ello, la mejor de las opciones es una instalación de pintura versátil, ya sea aplicación de pintura en polvo, pintura líquida, o ambas. Para ello se precisa un horno estático.

Otras veces se requiere trabajar piezas de gran volumen, de gran masa o especiales, cuya dificultad de trabajo o su especialización requiere ser tratada de manera individual. En estos casos, también los hornos estáticos es la herramienta más adecuada para estos trabajos.

Estos hornos industriales permiten que la entrada de material sea mediante transportadores aéreos, carros manuales, puente grúa, toros o otros elementos de movimiento de cargas, o incluso permiten la combinación de varios de ellos, como por ejemplo usar un transportador aéreo manual para piezas de más producción y usar un puente grúa que arrastre un carro o vagoneta para piezas de gran peso o volumen.

Los hornos estáticos tienen una buena respuesta energética ya que suelen tener formas compactas y de gran ahorro de combustible, gracias a sus puertas que deben ser cerradas para iniciar la hornada. De esta forma se aprovecha todo el calor.

Funcionan a distintas temperaturas según el tipo de aplicación: pintura líquida, pintura en polvo, rylsan, etc. Los hornos están siempre controlados por sonda y pirómetro, permitiendo distintos tipo de combustible.